Páginas

sábado, 3 de julio de 2021

Un poema de Ramón Bascuñana


De su libro Los días del tiempo (2002)



EL ÁNGEL EXTERMINADOR


Yo recorrí las tierras altas de Moab

y por mi espada murieron los adoradores de Baal.


Yo conocí la molicie de Sodoma y Gomorra

y degollé carneros en la noche de los tiempos.


Yo he escuchado en la sala de las dos verdades

las sentencias de los condenados,

y he cruzado la puerta de los suspiros.


Ni siquiera los hijos de los hijos de los hijos

de los constructores de la torre de Babel

conocen las sílabas completas de mi nombre.


Cuando acabe el banquete de los desesperados,

exterminaré a los puros de corazón.


Ni una mancha de culpa ni una gota de sangre

mancillarán la blancura del lino de mi túnica.

Mi única disculpa será que cumplí con mi deber.


(c) Manuel Ramón Moya Bascuñana




2 comentarios:

  1. Me gusta mucho ese tono casi bíblico, implacable. muchas gracias por compartirlo. Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar