Mi querida Noe acaba de entrar a formar parte de la nómina de poetas del excelente blog-antología "Insólitos", del poeta Joaquín Piqueras. He aquí el enlace:
NOELIA ILLÁN EN INSÓLITOS


The Artist (dirigida por Michel Hazanavicius) es una película singularísima, no sólo porque es casi en su totalidad muda o porque está rodada en blanco y negro, sino por su sensibilidad, por sus poéticas secuencias, porque es un hermoso homenaje al cine en particular y al arte en general realizado por personas que aman el cine y el arte. El personaje de George Valentin (Jean Dujardin), estrella del cine silente atormentado por su inadaptación al sonoro, se pasea entrañable por memorables escenas con el gracioso perrito Uggie o con la pizpireta Peppy Miller (Bérénice Bejo). Hay un descenso a los abismos para George Valentin, similar al que muchas estrellas del cine mudo padecieron con la llegada del sonoro, y que el cine ya ha reflejado en alguna memorable película ("El crepúsculo de los dioses", por ejemplo), pero también hay luz al final del túnel, una luz que muchas de esas estrellas no tuvieron, pero sí Valentin. Es una película optimista y luminosa entonces, ideal para iluminar estos tiempos de turbación y crisis con la luz de aquellos años inocentes anteriores al crack del 29, aquellos años donde brillaron con luz propia aquellos actores que sabían decir tanto sin emitir un sonido. Premiar esta película, como ya se está haciendo, es premiar, como dije en Facebook, la sensibilidad y la belleza que hacen más noble y soportable la vida. Háganse un favor: no se la bajen, véanla en la pantalla de un cine, merece la pena el esfuerzo.Hoy la ciudad amaneció mojada
lágrimas que no sé de dónde vienen
quién o quiénes nos dedicamos a fertilizar
el silencio de otros.
El tiempo otoñal, nublado,
la melancólica luz de las farolas
en el asfalto mojado.
Hoy amanecí llovido,
con una flor de tristeza entre las manos.
Descuartizo los grises con besos sin nombre
desplumo los días que nacen sin vocación navegable
aliento las alas que cortan los miedos
y llevo hasta tu nombre una esperanza que vuelque el sexo
sobre el inmenso Atlántico
Suda mi espalda un silencio de huesos y medusas
mi nombre se agiganta en las esquinas porosas del olvido,
hay un vuelo de redes que tropieza en cada vértigo.
la esperanza de tu océano se hizo naufragio o cangrejo
y acaricia los pantanos de mi nostalgia imposible...
Transité por olvidadas, anheladas orillas;
fui río y tambien fui el sueño de ese río;
fui los pájaros que antes quise ser y no había sido; fui destierrro y vela;
floté en un mar de sinsabores pero tambien fui el otro, el que quería;
tuve la palabra (ella la poesía)...
© Alexis Díaz-Pimienta, José Alfonso Pérez Martínez, Villo Argumánez, Noelia Tambornini, Fabricio Castañeda

Gracias por enviarme tu Preso en el tiempo, he disfrutado tus reflexiones, he sonreído con algunas de ellas, la estupidez humana es un bumerán... pero a quién golpea.
Me gusta leer estas cosas tuyas, tiene reflexiones muy claras con las que coincido en muchas.
Las que te salen del corazón me llegan, sobre todo esas en las que dejas ver que que no hay que esperar nada de lo que creamos y esa sobre el juego, nosotros no jugamos sólo por "ganar" y por eso lo aprecio especialmente.
Este libro que es como una copa de Baileys, deliciosa, intensa y corta como la vida misma, llena de recuerdos de pensamientos y vivencias. Pepe, me has dejado con sed....
Un libro excepcional, una mirada noble y comprometida ante la propia vida.
He esbozado alguna sonrisa con algunos de tus pensamientos fugaces, he fruncido el ceño con alguna de tus obsesiones sobre Dios, libertad, religión, política, etc, y me ha parecido curiosa y agradable tu mención a esa raza de lector y escritor que fue mi amigo tinerfeño Ezequiel Pérez Plasencia.
