Los 7 pecados capitales en Dragon Ball

La soberbia: VEGETA 

Vegeta es el hijo mayor de Vegeta III, el último monarca que tuvo el pueblo de los saiyanos antes de la destrucción de su planeta. Él siempre ha mantenido el orgullo de ser príncipe de nacimiento, miembro de la casta dirigente.

La avaricia: PILAF

Pilaf fue el primer villano de la serie. Cuando Goku era un niño que empezaba sus aventuras, Pilaf buscaba las bolas del dragón para pedirle a éste ser el rey del mundo. Quería ser el más poderoso y rico del mundo. Por supuesto que no lo logró. 

La lujuria: MUTENROSHI (EL DUENDE TORTUGA) 

Los deseos de Mutenroshi, el primer maestro de Goku, por las jovencitas son tan grandes como incombustibles. Le hemos visto muchas veces expulsando sangre por la nariz (el signo tradicional en manga y anime de la excitación sexual). No tiene remedio. 

La ira: BROLY

Broly es un saiyano que se deja llevar fácilmente por la ira y que es más poderoso conforme más se enfada. También puede ser muy cruel. Tiene rasgos de psicópata. 

La gula: SON GOKU 

Aunque todos los saiyanos necesitan comer mucho, pues gastan mucha energía en sus combates, ninguno ama más comer que el saiyano conocido como Kakaroto, rebautizado en la Tierra como Son Goku. Come cantidades ingentes de comida y disfruta mucho al hacerlo. 

La envidia: KRILIN 

Krilin, desde que estudió artes marciales junto a Son Goku, envidió la fuerza y el potencial de éste. Su envidia se ha extendido a toda la raza saiyana. De hecho en una historia alternativa reciente pidió al dragón ser un saiyano. Sin embargo debería mirar menos hacia otros y más hacia sí mismo: su crecimiento desde que era niño ha sido enorme y se ha transformado en el ser humano más poderoso. Los que tienen más poder que él son saiyanos, namekianos, dioses... Él representa el pináculo de fuerza de la raza humana y debería estar orgulloso de ello. 

La pereza: BEERUS/BILLS

Si en el universo 7 no hay más planetas destruidos es porque el dios de la destrucción de dicho universo es un gandulazo.